25 enero, 2010

Responsabilidad y conciencia, no es mucho pedir


Hace algún tiempo que intento realizar un llamamiento a la conciencia de las personas que tienen perros y los sacan a los parques a pasear, esos que muy tranquilamente observan como su perro caga, marchándose luego como si no ha pasado nada dejando la inconfundible huella con aroma incorporado en donde al perro le entraron las ganas; en realidad no creo que sea justo ni para padres que llevan a sus hijos al mismo parque, ni para las personas que no tienen perros y mucho menos para los que si tenemos y somos responsables de recoger la caca de éstos.
Particularmente cada vez que salgo con mi perro, entre las cosas que debo tener presente por sacar son las bolsas de recoger la caca, y que muy cívicamente puedes obtenerlas de unos dispensadores que se encuentran en los parques de forma gratuita colocadas por el ayuntamiento.
El sábado pasado he salido única y exclusivamente con cámara en mano para documentar lo que aquí comento y tratar de hacer llegar mi crítica un poco más lejos que de las paredes de mi casa, se podría decir que he hecho una sesión fotográfica de mierda.
Lo considero como una falta de consideración hacía los demás y que el simple hecho que traten de escudarse en que las personas encargadas de realizar mantenimiento y limpieza a calles y parques ya se encargarán de ello, pues permitidme deciros que además de ser una falta de respeto, a ellos no les pagan para que recojan la mierda de vuestros perros.
Son nuestros perros, son nuestra responsabilidad, las bolsas son GRATIS, se trata de un comportamiento cívico y responsable por parte nuestra, siempre salimos a las calles a exigir mejoras en nuestra comunidad porque para eso pagamos nuestros impuestos, exigimos áreas verdes para el esparcimiento de la ciudadanía, pero no son para convertirlos en pozos sépticos, muchos de nosotros somos ejemplo a seguir de las nuevas generaciones, por lo que no tendremos moral luego para exigir que después de que hagan un botellón nos dejen limpias las calles, los parques o la rambla, debemos aprender a respetar si queremos ser respetados.

13 enero, 2010

Un poco de mi



No siempre es fácil escribir sobre uno mismo, al menos así lo veo yo, pero lo haré como mejor me ha funcionado, hablando sobre mí en 3era persona y sintetizando:
- Azmy no toma café, pero bien que se disfruta olerlo mientras lo hacen.
- No soporta el maltrato a los animals, ni las injusticias.
- Siempre mantiene presente los gratos momentos vividos en la etapa de la universidad, y aunque sabe que esos tiempos no volverán, a veces le gustaría retroceder en el tiempo.
- Aún conserva esa cuota de humor negro con el que competia con un gran amigo de esa etapa, a ver quien era más M... en realidad creo que salían los dos triunfantes.
- Desde hace tiempo intenta escribir sus memorias, pero al parecer el alemán ese la mantiene ocupada.
- Es una apasionada por los perros, antes se babea por un perro en la calle que por un chico guapo, ella sabe muy bien que el perro le será fiel.
- Le encanta dormir hasta tarde, cuando puede y cuando no tiene la sinfónica de ronquidos a su lado.
- Le fascina ir al cine, pero más le fascina una buena película de terror, con un buen combo de palomitas de maíz y su Coca Cola tamaño familiar, y cuando se le acaba la bebida termina bebiéndose la de su vecino de al lado, así no lo conozca.
- Es increíblemente detallista, demasiado para mi gusto, está pendiente de si tu pelo va bien, si la bolsa te combina con los zapatos, si la manicura está bien hecha, en fin .... mujer tenia que ser
- Sabe muy bien que con el paso de los años ha ganado algunos kilos de más, pero ella prefiere pensar que la ropa se la ha encogido, siempre engañándose así misma.
- La mayoría de las veces peca por su sinceridad, pero con el tiempo ha aprendido a quedarse callada si no tiene nada bueno que decir, y prefiere meterse una barra de chocolate a la boca, debe ser por eso lo de los kilitos de más.
- Ella sabe muy bien que no es monedita de oro para caerle bien a todo el mundo, vamos que muchas veces ni ella misma se soporta.
- Siempre se dice que tiene que salir a la calle con la cámara fotográfica lista para documentar lo que ve en la calle, pero nunca se acuerda de llevarla consigo y mucho menos de usar la cámara del móvil, ella dice que esas fotos son “chimbas”, como si necesitase tanta resolución.
- La mejor manera de mantener el ánimo es riéndose de ella misma, pero una cerveza bien fría no le caería nada mal.
- No le importa si está en invierno, primavera o lo que sea, la bebida fría tiene que ser FRIA! … a términos medio no le funciona, no le tacañees el hielo, la ofendes.
- Su mamá le dice que es linda, pero todos sabemos que no hay hijo feo para las madres.
- Lloro cuando mataron al papá de Simba, en el Rey León, sé que le da pena decirlo, yo lo cuento por ella.
- Piensa que eso de derechas e izquierdas está pasado de moda, pero como ella de política no sabe y tampoco es algo que le quita el sueño, no le importa seguir diciéndolo.
- Aprendió que la frase “me meo” significa “me muero de la risa”, antes respondía “al fondo a la derecha”.
- Todavía no entiende el porqué de … subir para arriba, bajar para abajo, salir para afuera o entrar para adentro?, pero vamos que algún día lo entenderá, tan lenta tampoco es.
- Sufre más con el calor que con el frío, y OJO! que aún no está ni cerca de la menopausia, pero ella es así.
- Le hace mucho ruido los “horrores ortográficos”, aún no concibe que el hecho de que los MSM, las redes sociales, y esas cosas que te hacen escribir con ciertos modismos para ahorrar tiempo y espacio, sean un justificante para que atropelles el idioma en cualquier anuncio normal, común y silvestre que sea de dominio público, que los acentos pasen por alto, pero “ombre que hescrivas tan várbaramente mal para opinar sovre algo” …. uuufff que mal no???
- No tiene hijos, pero si tiene perro, y pues le toca igual llevarlo al parque y compartir con los otros padres que pasean también a sus hijos 4 patas, y los comentarios no pasan de lo cotidiano: que si uno le muerde los muebles, que si el otro le esconde los zapatos, el de ella intento morder al de la vecina el otro día, etc …. cualquier similitud con la realidad es pura coincidencia.
- Es algo minimalista para decorar, pero aquí entre nos yo diría que todo es motivado a que son menos trastos para desempolvar.
- Se disfruta la cocina, y si tiene un “pinche” que le prepare los vermouth, mejor que mejor, bueno siempre y cuando cocinar no se le convierta en una obligación.

Y al igual que una gran mayoría, probablemente estos puntos no reflejan en totalidad quien es Azmy, pero sí que dejan ver una parte de su esencia, por lo que me atrevo a pensar que seguramente me pedirá que le redacte una 2da parte … ;)

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